¿Qué tiene de malo el Sexo fuera del Matrimonio?

He entendido que todo lo que Dios hace, esto será perpetuo: sobre aquello no se añadirá, ni de ello se disminuirá; y lo hace Dios, para que delante de él teman los hombres. Eclesiastés 3:14
SOMOS ADVENTISTAS
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El sexo fuera del matrimonio es disfrutar fuera de tiempo un regalo que Dios reservó para los hombres y mujeres casados. Esto, que dentro del matrimonio establecido por Dios es una bendición que produce vida en la pareja, fuera del matrimonio es un pecado que produce maldición a la pareja. El acto sexual puede ser el mismo, pero dentro del matrimonio es A TIEMPO y fuera del matrimonio es FUERA DE TIEMPO. El sexo fuera del matrimonio podría dividirse en dos grandes ramas:
EL ADULTERIO:
Sea bendito tu manantial; Y alégrate con la mujer de tu mocedad. Como cierva amada y graciosa corza, Sus pechos te satisfagan en todo tiempo; Y en su amor recréate siempre. ¿Y por qué, hijo mío, andarás ciego con la ajena, Y abrazarás el seno de la extraña? Pues que los caminos del hombre están ante los ojos del Señor, Y él considera todas sus veredas. Proverbios 5:18-21
El hombre casado que pone sus ojos y sus manos en otra mujer que no es su esposa, se convierte en un ciego. La mujer casada que pone en riesgo su matrimonio y su familia por tener amoríos con hombres fuera del matrimonio, es la mujer insensata que con sus propias manos destruye su casa. Siembran semillas de muerte en su matrimonio y destrucción para si mismos, su familia, y la sociedad. El adulterio es un mal rampante, habla de la incapacidad de hombres y mujeres por igual, de ser fieles. Al que es infiel en lo poco, aún lo poco que tiene le será quitado.
HIJO mío, sé atento a mi sabiduría, Y a mi inteligencia inclina tu oído; Para que guardes consejo, Y tus labios conserven la ciencia. Porque los labios de la extraña destilan miel, Y su paladar es más blando que el aceite; Mas su fin es amargo como el ajenjo, Agudo como cuchillo de dos filos. Sus pies descienden á la muerte; Sus pasos sustentan el sepulcro: Proverbios 5:1-5
Las mujeres casadas que aman a su marido, y tienen a Dios por cabeza, tienen que orar por su esposo todos los días. Hay mujeres rameras, adúlteras y prostitutas que andan cazando almas de hombres allá afuera. Aunque por ellas murió Cristo, si ellas están cazando hombres evidentemente no conocen a Dios. Es la misión de la mujer casada, ser ayuda idónea del marido. Lejos de envolverse en miles de actividades que la mantengan distraída, en darles prioridad a los hijos sobre el esposo, o a las amigas o actividades de la iglesia, por encima de su relación con su esposo, la mujer que ama y obedece a Dios debe poner a su marido en el segundo lugar de su vida después de Dios. El matrimonio cristiano tiene cientos de beneficios otorgados por Dios a los cuales ellos tienen acceso cuando ejercitan su fe. El primer pacto de Dios con los hombres, fue precisamente el Matrimonio en el Génesis. Los matrimonios cristianos gozan de un doble-doble pacto con Dios: El primer pacto, en el cual Dios bendeciría sus hijos, su familia, y el último Pacto, en el cual Jesucristo es intermedio entre ellos y Dios. Es doble pacto porque es un pacto entre hombres –matrimonio- y entre el matrimonio con Dios, y entre el esposo y la esposa con Jesucristo.
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La mujer no tiene potestad de su propio cuerpo, sino el marido: é igualmente tampoco el marido tiene potestad de su propio cuerpo, sino la mujer. No os defraudéis el uno al otro, á no ser por algún tiempo de mutuo consentimiento, para ocuparos en la oración: y volved á juntaros en uno, porque no os tiente Satanás á causa de vuestra incontinencia. 1ra de Corintios 7:4-5
Hombres casados, no se confíen: Hoy en día el índice de mujeres casadas buscando amores fuera del matrimonio es proporcional al de hombres buscando amores fuera del matrimonio. El adulterio está rampante en el mundo y es aceptado socialmente en todos los niveles. La lucha ciertamente es mucha, hay que estar bien conscientes que detrás de toda esta destrucción esta Satanás. Si el esposo orara diariamente por su esposa, para que Dios la bendiga, restaure su cuerpo –si esta ha tenido hijos- sea librada de tentaciones, de hombres malos, el esposo estaría ejerciendo la potestad sobre el cuerpo de su esposa de la que la Biblia habla. Potestad no significa solamente que su cuerpo le pertenece a el para tener relaciones sexuales. Tener potestad sobre el cuerpo de tu esposa significa que Dios te la dio a ti, y que es tuya, y que ningún otro hombre puede obtenerla si tú estas haciendo tu parte, orando por ella, sujetando a tu esposa a la voluntad de Dios. No hay nada que alarme y asuste mas al diablo que un varón de Dios orando y bendiciendo a su esposa diariamente. Igualmente, la misma potestad le dio Dios a la mujer. Ella tiene la potestad sobre el cuerpo de su esposo, es de ella y nadie mas tiene derecho a disfrutar del amor de su esposo, además a ella y a nadie mas se le dio el puesto de ayuda idónea. La esposa debe orar diariamente por su esposo, sujetando todo su ser, espíritu alma y cuerpo bajo la voluntad de Dios. Declarando diariamente que su esposo es un hijo de Dios, pidiéndole a Dios que lo libre precisamente de la mujer extraña, la adúltera y la prostituta. Porque escrito está que el hombre cae fácilmente en esas trampas. El libro de Proverbios tiene mensajes de un Padre amoroso a su Hijo diciéndole: No caigas en brazos de la mujer extraña: Ella no es tu esposa, ni la mujer de tu juventud.
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LA FORNICACION:
Fornicación, y vino, y mosto quitan el corazón. Oseas 4:11
Huid la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre hiciere, fuera del cuerpo es; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca. ¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros? Porque comprados sois por precio: glorificad pues á Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios. I de Corintios 6:18-20
La fornicación es el pecado de tener relaciones sexuales con una o varias personas a lo largo de la vida sin que haya un pacto de matrimonio de por medio. En estos tiempos se puede añadir a este pecado una abominación para Dios: El homosexualismo. Este pecado es doble pues además de fornicación es echarse varones con varones o mujeres con mujeres y esto añade al pecado, abominación.
No pondrán sus pensamientos en volverse a su Dios, porque espíritu de fornicación está en medio de ellos, y no conocen al Señor. Oseas 5:4
La fornicación es un problema espiritual. Miles de jóvenes cristianos están siendo tentados, y cayendo, diariamente en el pecado de la fornicacion. El mundo no lo ve mal, hasta dicen que es lindo demostrar el amor a tu pareja de esa manera. No se ponen a pensar que fuera del matrimonio el sexo es pecado. Que las múltiples relaciones sexuales producen enfermedades venéreas, cáncer de la matriz, contagios de SIDA y en el menor de los males, embarazos fuera de tiempo, embarazos no deseados. Esto produce un pecado mayor, el aborto, el cual causa sentimientos de culpa; las personas que viven esta vida y que no conocen a Dios, van descendiendo en espirales para abajo fuera de control. Ya “no es malo” el sexo fuera de matrimonio, tener relaciones sexuales con quien sea, solteros, casados, viudos, divorciados es igual. Cuando una persona ha sido contaminada sexualmente es mucho más fácil abrir otras puertas a pecados sexuales que la Biblia describe como abominaciones: Sexo entre personas del mismo sexo, orgías, sexo con animales, y barbaridades como esas. El pecado añade pecado.
No visitaré sobre vuestras hijas cuando fornicaren, y sobre vuestras nueras cuando adulteraren: porque ellos ofrecen con las rameras, y con las malas mujeres sacrifican: por tanto, el pueblo sin entendimiento caerá. Oseas 4:14
He escuchado jóvenes cristianos decir: el sexo entre novios no puede ser malo. Dios no puede castigar a dos personas que se aman. Por supuesto que Dios no castiga a nadie por amarse. Pero Dios a quien ama corrige, y la fornicacion es un pecado de rebelión contra Dios y su palabra, es creer que ellos conocen mejor los tiempos, es ignorar el pacto de Matrimonio, la bendición de tener como cabeza a Cristo y como fundamento de su casa la palabra de Dios. Es empezar mal, y terminar mal. FUERA DE TIEMPO. Dios no se aparta de los fornicarios. Los fornicarios, por su pecado, SE APARTAN DE DIOS y al apartarse de Dios habiendo conocido Su palabra, con sus actos atraen todas las malas consecuencias que Satanás está ansioso de restregar en tu vida.
¿Qué, hijo mío? ¿Y qué, hijo de mi vientre? ¿Y qué, hijo de mis deseos? No des á las mujeres tu fuerza, Ni tus caminos á lo que es para destruir los reyes. Proverbios 31:2-3
Es responsabilidad de los padres instruir a sus hijas e hijos en la necesidad de reservarse para el matrimonio. Antes, los hombres se casaban jóvenes y las mujeres también y así iniciaban su vida sexual a tiempo, en su juventud, cuando las hormonas andan mas alborotadas ellos ya estaban casados y disfrutando del sexo dentro del matrimonio. Tenían hijos siendo jóvenes y fuertes, y se desocupaban de las labores de crianza siendo todavía muy jóvenes, teniendo tiempo así de seguir disfrutando del sexo en el matrimonio por muchos años. Ahora, la moda es casarse muy tarde ya, cuando ya estarán entrando en los 40’s, después de toda una juventud de fornicaciones, y solo para “sentar” cabeza, y si es posible, tener ahora sí hijos: todo esto es FUERA DE TIEMPO. La Biblia habla de la prioridad de empezar jóvenes cuando todo esta a tu favor, a tiempo. Por eso amonesta al hombre recordándole a “la mujer de su juventud”.
No os ha tomado tentación, sino humana: más fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis llevar; antes dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis aguantar. I de Corintios 10:13
Si tú perteneces a un matrimonio Cristiano, establece tus prioridades hoy mismo: Dios es tu cabeza, y la Palabra de Dios el fundamento de tu casa. Oras por tu cónyuge diariamente, y por tus hijos para que sean librados de toda tentación. Instruye a tus hijos diles que está bien casarse jóvenes y comenzar a formar familia mientras sus cuerpos son jóvenes y fuertes. El matrimonio, lejos de ser una esclavitud, es el estado perfecto de los hombres y mujeres que aman a Dios. El sexo dentro del matrimonio produce placer, seguridad, amor, comprensión y es el epítome de ser UNA SOLA CARNE: En cuerpo, alma y espíritu alineados a la voluntad de Dios.
No es posición de la iglesia decidir quién puede casarse o no, o cuándo. Es responsabilidad de los padres instruir a los hijos, explicarles todas las consecuencias del pecado sexual, y explicarles que la sociedad y el mundo dicen que no debes casarte joven, que primero debes ser un profesionista o cosas por el estilo. El mundo impone estas “reglas” porque el mundo pertenece a Satanás y sus frutos son todos los pecados sexuales que hemos visto. Mientras mas se esperan los jóvenes porque el mundo así lo dicta, más jóvenes cristianos caen en esos pecados, de los cuales si se arrepienten Dios los perdona, y limpia, pero las consecuencias y cicatrices permanecerán por largo tiempo. Si tú tienes hijos adolescentes, ponte de acuerdo con tu esposo(a) para hablar de Sexo como Dios lo diseñó y enseña a tus hijos que pueden confiar en ti, que tu puedes orar con ellos, por ellos cuando se sientan tentados. Apoya a tus hijos para pedir a Dios esposo o esposa, Su voluntad para ellos. Oren juntos y de acuerdo como familia y verán que cuando esto se hace, se esta cumpliendo el plan de Dios y ejerciendo el Poder que Dios ha dado al matrimonio y la familia cristiana para vencer en estos tiempos terribles que nos ha tocado vivir.
SOMOS ADVENTISTAS
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¿No sabéis que los injustos no poseerán el reino de Dios? No erréis, que ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones, Ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los robadores, heredarán el reino de Dios. Y esto erais algunos: mas ya sois lavados, más ya sois santificados, mas ya sois justificados en el nombre del Señor Jesús, y por el Espíritu de nuestro Dios. I de Corintios 6:9-11
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